Brotes y Germinados
Hoy en día escuchar la palabra brotes y germinados esta a la orden del día, en conversaciones, supermercados, cartas en los restaurantes, muchas veces la vida va tan rápida que lo incluimos sin verdaderamente saber que son, cual es la diferencia o que nos puede aportar…
Curioso verdad… quizá ahora te estes preguntando qué diferencia hay entre un brote y un germinado, te lo cuento en estas líneas:
- Brote cuando aparecen las primeras hojas, donde la planta es capaz de hacer fotosíntesis e incorporar clorofila.
- La germinaciónal primer estado de la semilla, cuando tiene su primera raíz y comienza a formar el tallo.
¿Qué son los germinados?
En líneas generales podemos decir que son semillas comestibles, ya que están considerados alimentos vivos. La germinación es el proceso natural por el cual la semilla, comienza a mostrar los tallos, brotes y pequeñas hojas y como son plantas muy jóvenes, paseen un valor nutricional alto.
Pueden convertirse en una opción nutritiva y bastante interesante, siempre dentro de una dieta equilibrada.
¿Qué nos pueden aportar?
Destaca especialmente su riqueza tanto en vitaminas (como la A, C, D, E, K, U y vitaminas del grupo B, como la B1, B2, B3 y B6), así como en minerales (sílice, calcio, hierro o manganeso).
Por este motivo, los beneficios de los germinados los convierten en una buenísima opción a la hora de favorecer la regeneración tanto de nuestro sistema digestivo como de la circulación sanguínea, además de su interesante aporte energético.
Se trata de alimentos que poseen un alto contenido de fibra, por lo que son frecuentemente recomendados para combatir el estreñimiento.
Tienen un alto contenido de potasio, las hace perfectas para regular la presión arterial. Los germinados también pueden ayudar a controlar los niveles de azúcar en la sangre.
Son ricos en fitoestrógenos, se aconseja su consumo en mujeres que atraviesan la menopausia, son solo algunas de sus funciones más comunes, ya que suelen usarse para más fines.
¿Cuántos tipos hay?
De forma rápida podemos hacer una clasificación de los más comunes:
- Guisantes germinados: lentejas, garbanzos, frijoles…
- Granos germinados: arroz integral, trigo, amaranto, quinoa, avena…
- Vegetales germinados: rábanos, brócoli, cebolla…
- Semillas germinadas: almendras, semillas de alfalfa, de calabaza, de sésamo, de girasol…
Es importante aclarar que no de todas las semillas se pueden tomar los germinados ya que algunos de ellos resultan tóxicos como los pimientos, el tomate o la patata.
¿Cómo consumir los germinados?
Su consumo es muy versátil. Crudos en ensaladas, burritos, creps, sándwich… ligeramente cocidos o como acompañantes de guisos.
¿Cómo se puede hacer en casa?
Con este germinador de brotes para casa, podrás tenerlo en la cocina y ver cada día la evolución junto con los peques.
Tras unos días podrás añadir tus ricos brotes a las ensaladas y platos que más te gusten solo tienes que dejar volar tu imaginación.
Se necesitan las semillas de los brotes y ponerlas en remojo unas horas, cada variedad tiene su tiempo o algunas no hace falta solo se pulverizan en germinadora. Lee siempre las instrucciones.
Fíjate que la tapa tiene los agujeros descubiertos y vacía el plato de las semillas sobre la rejilla y llena de agua el recipiente de la germinadora. (siempre debe tener el mismo nivel de agua)
Coloca la tapa y déjalo a una temperatura entre 20-25 grados durante 5-6 días.
Las semillas germinan con o sin luz, pero debes evitar el sol directo.
Al segundo día quita la tapa y deja que vayan creciendo las semillas.
Tras 5-6 días puedes extraer los germinados junto con las raíces y estarán listas para consumir. Algunas variedades pueden tardar más días.
La germinadora se limpia con agua y los brotes restantes los puedes guardar en la nevera en un bote cerrado aguantan hasta dos semanas.
¿Te animas? Recuerda que siempre podrás contar con mi asesoramiento personalizado 😊